
Si lo que queremos es aumentar el rendimiento, debemos medir la productividad para que podamos identificar las posibilidades de mejora.
Te hablare de algunas acciones que podemos llevar a cabo para medir:
- Llevar un registro de las horas de trabajo y de la cantidad de la tarea que se ha completado en esas horas: Está acción nos ayudara a identificar las horas de mayor rendimiento, y a su vez las distracciones más importantes. Por lo que al final, podremos hacer comparativas después de aplicar cambios a nuestras rutinas.
- Elaborar listas de objetivos con la mayor claridad: Tenemos que determinar qué es lo que se tiene que hacer, ya que nos permitirá el organizar el trabajo y poder medirlo. Nos será más fácil el segmentar las tareas e identificar qué porcentaje de trabajo y tareas has completado en tu jornada laboral.
- Fragmentar los objetivos en las tareas mínimas: Es de suma importancia que se precisen los objetivos más pequeños para que evitemos que las tareas “grandes” nos abrumen.